Hacía ya un tiempo que algunas clientas nos pedían unas extrañas agujas de ganchillo con un ojal al final.... Bueno, pues el Knook ya está a la venta en nuestra tienda. ¿Que no sabéis qué es? Pues os contamos un poco...
El Knook es una aguja de ganchillo con un orificio al final, por el
que se enhebra la lana como en una aguja de coser. El sistema de tejido
es una mezcla entre aguja de crochet y aguja de punto de media
tradicional. Tiene la ventaja de que no duele la espalda como al tejer
con agujas de punto pero el resultado es muy parecido al punto.
La forma de tejer es muy similar a la técnica del ganchillo. La primera fila se teje en cadeneta, así que no es necesario aprender una nueva forma de empezar.Los puntos se quedan en el cable mientras se está trabajando, así que hay menos peligro de que se te salga un punto.
Por el momento no hay muchos patrones por la red para tejer knooking pero con un poco de paciencia se encuentran cosas interesantes. Hay que tener en cuenta que la variedad de prendas que se pueden tejer es más limitada que con las agujas de media tradicionales.
En cuanto a velocidad de tejido es más lento que el ganchillo pero
más rápido que tejer con dos agujas.
Para que os hagáis una idea de la técnica, en el siguiente enlace encontraréis un tutorial que lo explica muy bien:
http://es.dawanda.com/ideas-diy/punto-y-crochet/tutorial-iniciacion-al-knooking
Y en éste tenéis una bonita funda de móvil que podéis tejer con esta técnica:
http://www.lahilandera.com/blog/tutorial-de-knooking-funda-de-movil/http://www.lahilandera.com/blog/tutorial-de-knooking-funda-de-movil/
Si buceáis un poquito por la red encontraréis varias propuestas interesantes para ir enganchándose a esta nueva técnica.
Esperamos que os animéis a probarla.
Fuentes:
http://www.lahilandera.com/blog/
http://es.dawanda.com/
martes, 20 de enero de 2015
domingo, 4 de enero de 2015
Tutorial turbante de punto
Queremos empezar el año con nuevas ideas, por eso os traemos este sencillo tutorial para aprovechar los restitos de lana que nos queden por ahí. Esos sobrantes se pueden usar para hacer un sencillo turbante de punto.
En esta ocasión hemos utilizado una lana gordita: Alaska de Katia.
Sobre aguja del 7 montamos 12 puntos, que equivalen a unos 9 cms. El ancho lo podéis variar a vuestro gusto. En nuestro caso no lo hacemos excesivamente ancho porque son turbantes para niñas. Si es para adulto podéis añadir 3 o 4 puntos más.
Tejer a punto de arroz durante unos 40 cm si es para niña (como es el caso) y si es para adulto durante unos 45 cm. De todas formas, lo mejor es que os lo vayáis probando en vuestras cabezas. Tened en cuenta que el turbante debe ir un poco justo para que sujete el pelo o caliente las orejas, según sea el caso.
Una vez tejido cerramos los puntos.
Ahora tejemos una parte central a modo de adorno para que se asemeje a un lazo. Montamos 5 puntos en una lana del mismo color o en contraste.
Tejemos durante unos 7/8 cm y cerramos los puntos.
Como hemos hecho dos turbantes, hemos intercambiado las piezas centrales para que queden más vistosos.
Primero unimos el principio y el final de la pieza principal, frunciendo un poquito cada lado, y luego cosiéndolos juntos. Así queda más coqueto. Para fruncir, basta con pasar la aguja de lado a lado, arrugando ligeramente lo tejido.
La unión de las dos partes la ocultaremos con la pieza central, que coseremos dándole algún puntito en el centro para que no se mueva.
Y tachán!, ya tenemos unos bonitos turbantes, sencillos y vistosos.
Podéis variarlos utilizando otros puntos, lanas multicolor....
Echádle imaginación. Y aprovechad esas bolitas de lana que quedan por casa, que se pueden hacer un montón de cosas.
En esta ocasión hemos utilizado una lana gordita: Alaska de Katia.
Sobre aguja del 7 montamos 12 puntos, que equivalen a unos 9 cms. El ancho lo podéis variar a vuestro gusto. En nuestro caso no lo hacemos excesivamente ancho porque son turbantes para niñas. Si es para adulto podéis añadir 3 o 4 puntos más.
Tejer a punto de arroz durante unos 40 cm si es para niña (como es el caso) y si es para adulto durante unos 45 cm. De todas formas, lo mejor es que os lo vayáis probando en vuestras cabezas. Tened en cuenta que el turbante debe ir un poco justo para que sujete el pelo o caliente las orejas, según sea el caso.
Una vez tejido cerramos los puntos.
Ahora tejemos una parte central a modo de adorno para que se asemeje a un lazo. Montamos 5 puntos en una lana del mismo color o en contraste.
Tejemos durante unos 7/8 cm y cerramos los puntos.
Como hemos hecho dos turbantes, hemos intercambiado las piezas centrales para que queden más vistosos.
Primero unimos el principio y el final de la pieza principal, frunciendo un poquito cada lado, y luego cosiéndolos juntos. Así queda más coqueto. Para fruncir, basta con pasar la aguja de lado a lado, arrugando ligeramente lo tejido.
La unión de las dos partes la ocultaremos con la pieza central, que coseremos dándole algún puntito en el centro para que no se mueva.
Y tachán!, ya tenemos unos bonitos turbantes, sencillos y vistosos.
Podéis variarlos utilizando otros puntos, lanas multicolor....
Echádle imaginación. Y aprovechad esas bolitas de lana que quedan por casa, que se pueden hacer un montón de cosas.
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